Multitud de inversores (sobre todo a corto plazo) tratan de predecir eventos sociales, económicos o políticos con el propósito de ganar dinero en los mercados. Ninguna objeción por mi parte. Cada uno es muy libre y toda persona que se juega su dinero me merece todo el respeto. Ilustraré los peligros de este tipo de estrategia utilizando la noticia de la semana: la victoria electoral de Donald Trump en USA.
Hay tres condiciones necesarias para ganar dinero acertando un resultado electoral:
- Acertar el propio resultado, bastante obvio, ¿no?
- Acertar las consecuencias en los mercados.
- Que muchos otros inversores no acierten, ya que si lo hacen se anticipan, mueven los precios y cierran las oportunidades de beneficio.
En el caso de las presidenciales casi todo el mundo (por más que ahora cambien su historia) pensaba que iba a ganar Hillary Clinton. Comentaristas, medios de comunicación y público en general. Similar al resultado del Brexit en el que el propio Farage dio por ganador a permanecer en la UE (¡siendo uno de los proponentes de irse!). Es decir, el “consenso” era el resultado equivocado. Y es muy difícil resistirse a la presión de seguir a la manada.
Aun así, supongamos que somos tan buenos analistas que podemos predecir la victoria de Trump. Lo lógico era pensar que con la sorpresa del resultado y las medidas económicas del candidato las bolsas caerían. Con lo cual, por ejemplo, podríamos adquirir posiciones cortas en acciones USA (o sea, apostar por una caída) o en acciones Europeas. Comprar oro. Pues bien, salvo algo de pánico inicial en Japón y en el mercado del oro (que en el momento de escribir han recuperado valores pre elección) las bolsas incluso subieron en la primera sesión en USA.
Solamente activos como el peso Mejicano y las acciones del mismo país parecen haber sufrido un impacto duradero. Pero hay que ser bastante sagaz para de nuevo predecir los únicos activos que han dado una oportunidad realmente clara de beneficio.
Resumiendo, predecir el evento es muy difícil. Predecir las consecuencias del evento también. Especular con este estilo es realmente peligroso dada la baja probabilidad de acertar ambas cosas. Si invertimos al evento de gran probabilidad muchos otros lo harán cerrando la oportunidad. Por otro lado los pequeños inversores carecemos de la información y el tiempo necesarios para tener la mínima oportunidad en este tipo de juego.
Es por esto que en esta web proponemos la inversión impasible. En primer lugar porque la política y los medios producen sobre todo “ruido”. Y en segundo lugar porque es mejor basarse en lo que ha pasado (los precios) que en hipótesis arriesgadas de lo que va a pasar. Si los precios suben vendemos, si los precios bajan compramos. ¡Da exactamente igual quien ha ganado y cuales han sido las consecuencias!